Author: Verónica
•9:21

El libro Mis días contados del publicista y catedrático de la Facultad de Filosofía de la Universidad Nacional de Asunción, Rubén Ovelar Melgarejo sirve de inspiración para que las personas luchen contra el cáncer y no se rindan.
 Narra su experiencia en la lucha contra el cáncer de riñón y de colón. Expresa que el apoyo de sus familiares y amigos fue el motor de su fuerza de voluntad en esa guerra contra esta enfermedad.
El dinero de la venta de los libros se donará a la Fundación de Ayuda a niños y niñas con cáncer y Leucemia (Asoleu).
Testimonio de vida. El autor manifiesta en el prólogo de su libro que se decidió a escribir esto como un testimonio de vida. Eligió el título Mis días contados porque encierra ese deseo de narrar lo que sucede en la mente de una persona que padece esta enfermedad.
Describe cómo reaccionó ante los diagnósticos de dos tipos de cáncer. La actitud que tomó ante esta situación fue positiva afrontando el largo proceso del combate contra este mal. Esta lucha no fue en solitario lo hizo con su familia y amigos.
 En una de sus páginas del libro dice que aprendió de esa experiencia a darle valor al hoy, para no retrasar ese abrazo a alguien que uno estima o no callar el ´´te quiero´´. La intención que mueve al autor es contar la historia de sus batallas contra una cruel enfermedad, compartir sus miedos y esperanzas, transmitir sus caídas y también sus levantadas.
Con este libro quiere  transmitir un testimonio de manera optimista  sus peripecias vividas y motivar a quienes padecen los embates de este mal.
Mis días contados. Mis días contados es una crónica de la experiencia del profesor Rubén Ovelar  en su lucha contra el cáncer. Narra cada uno de los momentos que le tocó vivir con una sensibilidad tan humana, desde los diagnósticos hasta la recuperación de su salud.
En el libro se pueden hallar frases alentadoras como ‘’Yo estaba preparado para emprender mi guerra.Y era una guerra que debía vencer’’, ‘’El tenaz mal se equivocó, porque en lugar de afectar a una persona, la lucha no fue, para nada, solitaria´´, ´´Aprendí que sólo el que persevera encuentra un mañana mejor’’.
En el mismo recomienda que los padres informen a sus hijos con respecto a la predisposición genética de transmitir algunos tipos de cáncer a los descendientes, como ser el de mama y el del colón.
 Aconseja a los lectores del libro pedir asesoramiento médico para conocer aquellos factores de riesgo y qué tipo de cáncer existe predisposición genética.
Pequeña biografía del autor
Su nombre completo es Nilo Rubén Ovelar Melgarejo. Nació en 1954 en Bella Vista, en el departamento de Amambay. Trabajó en la empresa Sucesos Paraguayos que tenía un noticiero en la vieja emisora de televisión Canal 9.
Sus primeras armas en la redacción las aprendió con su primer jefe Lionel Enrique Lara. Escribió para noticieros, cartas, notas, poesías, ensayos varios, obras de teatro y hasta letras de música. Era el tipeador oficial de sus escritos.
Otra persona con quien aprendió mucho e hizo sus primeras armas con respecto al campo de la comunicación publicitaria fue Sara Mussi. Trabajó en su agencia durante un poco más de 20 años. Ingresó como cadete y dejó la empresa siendo gerente general.
Se recibió de Licenciado en Contabilidad. Estudió Leyes. También es Licenciado en Administración de Empresas, en la Universidad Católica.
Realizó cursos de inglés en Washington D. C. y cursos de Marketing de Servicios en la Universidad Washington de esa misma ciudad.
Fue galardonado con la beca de la Cámara Junior Internacional para estudiar Liderazgo y Comunicación en la ciudad de Sendai(Japón).
Es propietario de la agencia publicitaria Senior. Es docente de la asignatura Publicidad en la carrera de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nacional de Asunción.

Imagen: www.abc.com.py
Author: Verónica
•8:19
La vida se volvió demasiado dificil de comprender. Las preguntas se hicieron frecuentes. A veces se tiene la certeza de una cuestión hasta que ¡zas! vuelve la duda y lo mueve de todo de lugar. No sé si alguna vez les paso a ustedes. Imaginan un mundo donde te creas una estructura mental en el cual te organizas con todos los detalles: Tienes tu Poder Ejecutivo, tu Poder Legislativo, tu Poder Judicial. O sea, creas tu gobierno personal y viene una persona o varias personas y te golpean toda esa estructura que surgió de tu inventiva. Entonces se cae toda la estructura edilicia de tu gobierno personal para volver a formar otro nuevo.

Pienso demasiado parece o me pongo estructuralista. No puedo realizar ningún acto sin tener un método o algo de que servirme. No entiendo cómo se las arreglan las personas sin tener una organización a cuestas. Todo lo tengo que hacer con un método o una guía para que me pueda orientar hacia qué camino voy a ir. No me gusta la incertidumbre. Mi mente vuela y realiza especulaciones en cantidad.


Las preguntas vinieron a mí y están golpeando con más frecuencia que antes. No puedo con mi genio de investigadora innata. Todo lo tengo que investigar. Soy insaciable en el conocimiento. Todo debo actualizarlo y chequearlo. No me canso en ese aspecto. ¿Será que por eso elegí el periodismo como mi carrera o es porque siempre fui demasiado curiosa a pesar de mi timidez? ¿O será que el periodismo me eligió a mí en el segundo año de la carrera donde empecé a amarla? En el segundo año de la carrera comenzó el amor al periodismo y mi separación de la literatura. La idea de estudiar periodismo fue para que más adelante me convirtiera en escritora o sostenerme para escribir libros. Pero desde el 2007 mi ser periodístico no deja que el literario se manifieste.

Es más, ahora mismo no encuentro sosiego para sentarme a escribir una novela. Mi mente está tan dispersa y con varias cosas. Tengo que redactar artículos y me paso pensando en cómo debo enfocar de manera original y creativa las notas. Un profesor me enseñó que debo amar lo que hago. La verdad es que amo con todo mi ser el periodismo. Es como parte de mí y ya no me quiero separar de él.

Volviendo al tema de las dudas, dudo todo y eso no sé si es malo o bueno. Dudo de la existencia de un Dios, de las religiones, de la política, etc. Parece que estoy en una etapa de cambios mentales o es una fase más de que algo no está bien y se tiene que ajustar.

Defini mi club al menos. Soy de Sol de América porque me encanta el color de la camiseta y el sol. También porque me gusta elegir lo que la mayoría no lo hace. En política no logré definirme. Es tan dificil saber si soy liberal con toda pureza o si soy socialista, o una mezcla de ambas ideologías. Hay ideas que me agradan como libertad de expresión o la idea de libertad de pensamiento, ser libre. Pero también me preocupa el otro que no puede defenderse o reclamar por sus derechos. Me enferma que haya tanta injusticia en el mundo o el tratamiento injusto que a veces damos sin querer a personas por causas de nuestros prejuicios.

Es incesante la duda en mi mente que creo que va a estallar una guerra civil dentro de mí. Cuando creo que tengo certeza de algo viene una persona y derriba todo mi edificio mental. ¿O será que no he hallado valores que sean indestructibles? ¿O será que construí una estructura con materiales de mala calidad?


Preguntas demasiadas preguntas como en el título de esta especie de comentario. Volvieron para quedarse. Y vaya que sí. Han durado muchos meses y años.
 Imagen: tipos.com.mx